Pensar propósitos a principio de un año nuevo es algo casi universal. Con el comienzo del año la gente tiende a marcarse objetivos y retos a cumplir a lo largo de ese año. Generalmente, esto es algo que llevan a cabo los adultos. No obstante, también resulta beneficioso que los niños también lo hagan y piensen en metas a realizar en el año nuevo. Por ese motivo, en el presente artículo os proporcionamos información sobre cómo establecer los propósitos de año nuevo de los niños y niñas en función de la edad tienen.
En primer lugar, algo que puede decirse tanto de los propósitos de los adultos como los de los niños es que éstos deben ser realistas y alcanzables. Proponerse metas imposibles de alcanzar solo nos provocará tener sensación de fracaso y frustración.
En segundo lugar, a los niños y niñas es necesario explicarles qué son los propósitos de año nuevo y para qué se los propone la familia. Las explicaciones deben ser claras y concisas para que entiendan el objetivo de la dinámica y la importancia que se le da.
Establecimiento de propósitos en función de la edad
3 años o menos
Se puede compartir con el niño alguna de las metas que se quieren conseguir a corto o medio plazo. Las metas a largo plazo es mejor no comentarlas ya que el niño o niña es tan pequeño que no tiene concepción del tiempo y no serviría de nada. Algunos ejemplos de propósitos en esta franja de edad son:
- Retirar el pañal
- Retirar el chupete
- Aprender a compartir los juguetes
- Aprender a recoger sus juguetes
En este caso resulta muy útil colocar imágenes o dibujos de cada propósito para que los niños y niñas tengan fácil acceso a él y puedan conseguirlo más fácilmente.
3 – 6 años
En este caso como son un poco más mayores pueden involucrarse un poco más a la hora de hacer la lista. Sin embargo, todavía serán los padres los que establecerán y propondrán los objetivos. Algunos ejemplos son:
- Recoger sus juguetes
- Aprender a comer solos
- Aprender hábitos como vestirse y desvestirse solos, lavarse la cara y las manos
- Llevar su mochila hasta la escuela
- Ayudar a los hermanos si los tienen o a los amigos de la escuela
6 – 10 años
En esta franja de edades los niños y niños ya son más mayores y ya han desarrollado más la capacidad del pensamiento abstracto. Por ese motivo ya son ellos los que deben proponer sus propios propósitos, aunque pueden recibir ayuda de los padres. Algunos ejemplos pueden ser:
- Ayudar más con las tareas de casa
- Tener recogida la habitación
- Asumir responsabilidad de la mascota familiar o de los hermanos más pequeños
- Hacer caso a lo que digan los adultos
- Estudiar y hacer todos los deberes de la escuela
Más de 10 años
De los 10 años en adelante los niños deben crear los propósitos y objetivos por ellos mismos siguiendo la misma dinámica. Es cierto que en estas edades puede que no quieran compartir todos los propósitos con los padres y que se guarden algunos para ellos. La intimidad de dichos propósitos deberá ser respetada por los miembros de la familia.
Por último, una idea divertida y original que a la vez servirá para unificar y cohesionar a la familia será realizar una lista de propósitos familiares. Todos los miembros de la familia deberán participar y ponerse de acuerdo con los propósitos. De este modo se reforzará el vínculo entre los miembros de la familia y ayudará también a aprender lo que es la cooperación.