Cuando hablamos acerca del consumo de tóxicos en adolescentes hay varios aspectos que deben tenerse en cuenta. El primero recae en conocer la etapa de la adolescencia.
La etapa de la adolescencia
La adolescencia es una etapa de la vida que se considera que comprende entre los 12 y los 18 años aproximadamente. Se caracteriza por ser una época de desarrollo físico y mental en la que se dan una serie de cambios tanto a nivel personal como cultural como social. Así, dicha etapa queda comprendida entre la infancia y la edad adulta. Lo que sucede a menudo es que los chicos y chicas que tienen estas edades son muy pequeños para hacer una serie de cosas y muy mayores para hacer otras.
Es imprescindible saber que la adolescencia es una época de desarrollo psicológico brutal. De esta forma, los adolescentes buscan su propia identidad y, en ocasiones, buscan los límites realizando conductas de riesgo. Por este motivo, generalmente dejan un poco más de lado a la familia y se centran y dan importancia a los iguales. Además, en muchas situaciones a los adolescentes les es difícil apreciar las consecuencias de sus acciones o de los demás.
¿Qué es el consumo de tóxicos?
Cuando hablamos de consumo de tóxicos nos referimos a una serie de substancias, algunas de ellas, ilegales que crean efectos perjudiciales a nivel cerebral a largo plazo.
Se consideran sustancias tóxicas:
- Tabaco (de las más frecuentes)
- Alcohol (de las más frecuentes)
- Cannabis (la droga ilegal más consumida en nuestro país)
- Cocaína
- Anfetaminas
- Opiáceos
Edad de inicio al consumo de tóxicos
La información existente en la actualidad afirma que las drogas más ampliamente consumidas son el tabaco y el alcohol, así como también las socialmente mejor aceptadas. La edad estimada de inicio de consumo de ambas sustancias se sitúa alrededor de los 13 años.
Por otro lado, la droga ilegal que más se consume en nuestro país es el cannabis. Se estima que la edad de inicio del consumo de dicha sustancia es a los 15 años.
Prevalencia del consumo de tóxicos entre los adolescentes
Los estudios científicos han demostrado que 1 de cada 4 jóvenes ha consumido alguna sustancia en el último mes. Entre ellas alcohol, tabaco, derivados del cannabis y cocaína. El consumo de este tipo de sustancias ha aumentado en los últimos años y se hipotetiza que es debido a los siguientes factores:
- Proximidad y facilidad para la compra de sustancias
- Aumento de trastornos mentales
- Aumento de problemas familiares
Consecuencias del consumo de tóxicos durante la adolescencia
Es cierto que cada sustancia tiene sus determinados efectos así como también sus determinadas consecuencias. En general, las consecuencias más frecuentes y comunes entre sustancias son:
- Deterioro cerebral: sobretodo a nivel de funciones cognitivas (pérdidas de memoria, dificultad en prestar atención, dificultad en la toma de decisiones y en la monitorización de la conducta, dificultades en los aprendizajes).
- Disminución del estado anímico: muchas sustancias provocan una disminución en el estado de ánimo y sintomatología depresiva, así como otros trastornos psicopatológicos.
- Posibilidad de desarrollar psicopatología psiquiátrica: en el caso de las personas que tienen una predisposición pueden presentar un brote psicótico a causa del consumo de cannabis y desarrollar patologías como la esquizofrenia entre otras.
- Deterioro psicosocial: generalmente, a raíz del consumo de tóxicos se producen discusiones y enfados con los que rodean al adolescente en cuestión. Así, normalmente los adolescentes que consumen se alejan de su círculo habitual de familiares y amistades y generan otros nuevos.
- Deterioro del organismo: problemas respiratorios (en el caso del tabaco sobretodo), cardíacos, disminución del sistema inmunitario
- Posibilidad de contraer enfermedades: a través de las jeringuillas compartidas.
Psicopatología más prevalente entre los adolescentes consumidores
En el apartado de consecuencias del consumo se ha comentado que los chicos y chicas que consumen tienen un mayor riesgo de desarrollar psicopatología psiquiátrica. En concreto, los trastornos más prevalentes entre los adolescentes consumidores se ha visto que son:
- Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH)
- Trastornos afectivos
- Trastornos de ansiedad
- Trastornos de conducta
- Trastornos de la conducta alimentaria
- Trastornos psicóticos