En general, las adicciones en la población adolescente han ido cambiando en estos últimos tiempos. Para resumir, podría afirmarse que puede crearse una adicción a sustancias tóxicas (como el alcohol o las drogas) y, por otro lado, también puede crearse una adicción a las pantallas (videojuegos, series, etc.). Estas adicciones que seguramente ya conocías siguen un patrón de comportamiento, normalmente disruptivo, que puede cambiarse durante el confinamiento. Con este artículo lo que pretendemos transmitir es que puede aprovecharse el confinamiento por Covid-19 para dejar a un lado las conductas adictivas.
Reducción o cese de consumo de tóxicos
Tal y como hemos comentado, el hecho de estar encerrado en casa y no poder salir puede ser una gran oportunidad para cesar el consumo de tóxicos. La compra de sustancias ilegales es más complicada y ha subido el precio del cannabis. Estos hechos pueden provocar que a la fuerza el adolescente haya tenido que reducir el consumo o hasta cesarlo y es algo que hay que aprovechar.
Síndrome de abstinencia en adolescentes
Resulta muy importante dejar claro que el síndrome de abstinencia varía mucho en función de la droga consumida. Así, hay procesos que son muy difíciles y duros como el de la heroína y, por el contrario, existen otros más sencillos que cursan únicamente con irritabilidad como en el caso de los porros.
En general, no tener acceso a una sustancia determinada casi siempre genera:
- Irritabilidad
- Enfado
- Ira
- Rabia
- Estar irascible
- Nervios
- Intranquilidad
¿Qué pueden hacer los padres?
Algo que pueden preguntarse los padres es, si mi hijo reduce o para de consumir, ¿qué puedo hacer yo para ayudarle? Principalmente los padres pueden ayudar haciendo lo siguiente:
- Reforzar positivamente. Valorar al adolescente el esfuerzo que está realizando. Compartir con él que seguramente estará siendo un proceso duro.
- Rescatar los cambios positivos. Para que el adolescente mantenga la conducta de abstinencia es necesario que vea que es algo positivo para él, que tiene más beneficios que costes. Por este motivo, los padres pueden ayudar a rescatar las cosas que está ganando con el cese del consumo. Algunas cosas de las que seguro que estará obteniendo beneficio son las siguientes:
- Conducta: menos conflictos familiares, hábitos saludables, colaboración en casa.
- Convivencia: mejora de la relación entre los miembros de la familia, más complicidad, tranquilidad.
- Cognición: seguro que el chico o chica notara cambios en su rendimiento cognitivo, así seguramente puede que note mejoras en la capacidad de la atención, en la memoria, en la elaboración del pensamiento y en el discurso entre otras.
- Compartir. Es un proceso difícil como para pasarlo solo. Por ese motivo, los padres pueden compartir con su hijo las estrategias a utilizar para superarlo. Dichas estrategias pueden ser:
- De afrontamiento: hablar sobre cómo está afrontando la situación, que pensamientos tiene, qué hace estos días o que podría hacer para sentirse mejor.
- De regulación emocional: buscar trucos o técnicas para tolerar la frustración, reducir los nervios, tranquilizarse, etc.
- De comunicación: recomendarle al chico o chica que hable de esto con quien quiera, familiares o amigos, pero dejar claro que es importante que se desahogue y saque al exterior su situación.
- Respetar la intimidad. La adolescencia es uno de los periodos de la vida en la que más se necesita el contacto social con los pares y más se necesita también la intimidad respecto a los padres. Estando confinados todos en casa eso se vuelve algo difícil, pero es importante no estar las 24 horas del día con el adolescente. Debe dejársele margen y espacio para que pueda estar solo y reflexionar sobre su situación.
- Mirada hacia el futuro. Algo recomendable también es, durante estos días de confinamiento, hablar con el adolescente sobre posibles proyectos de futuro: qué le gustaría hacer, qué cosas se le dan bien, a que podría dedicarse… Si se observa que el adolescente está lo suficientemente motivado pueden buscarse recursos que podrían serle útiles de cara a ese futuro hablado. Recordar que aquí lo importante no es agobiar al chico o chica para que decida que hacer en el futuro, sino se trata de reflexionar tranquilamente, sin obligaciones ni toma de decisiones.
Dichos trucos o técnicas tienen que ser pensados conjuntamente por el padre y el chico, no puede imponérsele ya que si no carece de sentido porque el chico no lo ejecutará.
Importante!!
- Si el adolescente sale al exterior para comprar o hacer algún trámite hay que tener presente que puede que sea un momento en el que aproveche para comprar tóxicos.
- Si el adolescente ha reducido el consumo, pero todavía consume limitar al máximo el consumo. Negociar las condiciones del consumo (momento, lugar, cantidad, etc.) si la abstinencia no es viable.
- Que el adolescente experimente actividades placenteras fuera del consumo. Realizar actividades agradables con él pueden ser la clave para que se “olvide” del consumo.
- Evitar las discusiones y fomentar canales de comunicación diarios sobre el estado anímico del adolescente.
Adicción a las pantallas
La adicción a las pantallas y a las nuevas tecnologías ya era un problema que existía con anterioridad al Covid-19. Sin embargo, por el hecho de estar encerrados en casa estas conductas se han multiplicado entre los adolescentes. La reducción de actividades en el día a día ha provocado que los niños y adolescentes se pasen las horas enfrente de una pantalla.
¿Qué pueden hacer los padres?
- Establecer horarios y rutinas. Teniendo en cuenta la situación en la que nos encontramos es importante que las horas de videojuego o de pantalla estén marcadas y delimitadas, sino los niños no saben parar. Para ello, puede resultar muy útil el uso de una alarma y a la hora que suene la alarma se acaban las pantallas.
- Diversificar las actividades de no-pantalla. Es importante que las madres y padres propongan a los hijos actividades divertidas a las que se puedan enganchar y puedan disfrutar que no impliquen el uso de las pantallas.
- Tareas del hogar. Implicar a los chicos a chicas en las tareas del hogar es una forma fácil y útil de que se separen de las pantallas.
- Hábitos saludables. Fomentar los hábitos saludables de alimentación, sueño e higiene es imprescindible para la salud de los niños y adolescentes. Además, puede contribuir a dejar las pantallas.
- Sociabilizar. Mantener el contacto social es imprescindible para los adolescentes. No obstante, los padres deberán intentar que este contacto sea a través de videollamadas por ejemplo, no solo a través de los juegos online.
- Momentos familiares. Intentar coincidir todos los miembros de la familia en ciertos momentos o actividades puede fomentar el sentimiento de cohesión familiar que puede ser beneficioso también.
- Evitar conflictos. Tal y como hemos comentado en el caso de la adicción a sustancias, es importante intentar evitar conflictos y mantener canales de comunicación activa de forma diaria.
Posibles reacciones ante el cese o disminución del contacto con las pantallas
Las posibles reacciones pueden ser muy variadas ya que dependerán del carácter y situación de cada chico o chica. No obstante, en general lo que sucede es lo siguiente:
- Irritabilidad
- Agresividad
- Ira y rabia
- Cambios en los hábitos de alimentación, sueño y relación con los demás
Contacto con un profesional
En este artículo describimos posibles síntomas y damos pautas generales para los padres de hijos con problemas de adicción, ya sea a nuevas tecnologías como a sustancias. Sin embargo, debemos recordar que en el caso de que la situación se vuelva peligrosa (para el chico o para el resto de miembros de la familia) o los padres se sientan desbordados o agobiados lo recomendable sería asistir a un profesional para que pueda ofrecer ayuda personalizada.